La comida mexicana y la española son dos de las cocinas más populares y apreciadas en todo el mundo. Aunque ambas tienen orígenes muy diferentes, han evolucionado y se han influenciado mutuamente, desde la llegada de los colonos españoles a suelo mexicano hasta la actualidad. Aunque la gastronomía española y mexicana tienen sus propias particularidades y diferencias, también tienen mucho en común y se nutren una de otra. Explorar estas similitudes y diferencias es una fascinante manera de descubrir la rica cultura culinaria de ambos países.
Esta es una de las experiencias que queremos que sientas cuando vengas a disfrutar de Mawey. Fundir en tu paladar los sabores e ingredientes más cautivadores de México y España. Todo en un solo platillo y a un precio muy asequible.
¿Cómo surgió la mezcla de ambas culturas en la cocina?
La gastronomía mexicana y española son dos de las más ricas y variadas del mundo. Y aunque sendas regiones distan a miles de kilómetros, han A lo largo de los siglos, la fusión de ambas culturas ha dado lugar a platos únicos y deliciosos que hoy en día podemos disfrutar en restaurantes como Mawey, donde la cocina mexicana y española se mezclan a la perfección.
La cocina mexicana y española comparten raíces en la antigua cocina mesoamericana y la gastronomía mediterránea, respectivamente. Ambas cocinas utilizan ingredientes frescos y de temporada, así como hierbas y especias que le dan ese toque especial a cada plato. Pero, ¿cómo se fusionaron estas dos culturas?
La llegada de los españoles a México trajo consigo una gran cantidad de ingredientes desconocidos hasta entonces en América como el trigo, el cerdo, la vaca o el vino. Estos nuevos ingredientes se combinaron con los que ya utilizaban los pueblos mesoamericanos como el maíz, los frijoles, el chile o el aguacate, dando lugar a una nueva gastronomía.
La fusión de ambas culturas también está muy influenciada por la religión, donde las monjas españolas cocinaron con los indígenas con los ingredientes y técnicas europeas más tradicionales. Así nacieron platos como el mole o los chiles en nogada, que fusionan ingredientes mexicanos con técnicas españolas.
¿Qué recetas fusionan la gastronomía española y mexicana?
El precioso tubérculo que da nombre a uno de los platos españoles más simbólicos de su gastronomía, la tortilla de patatas, no se descubrió hasta el siglo XV con la llegada de los colonos al nuevo continente. Este es uno de los ejemplos más claros del enriquecimiento en el recetario entre ambas culturas. Pero hay otros ejemplos de recetas que fusionan la comida mexicana y española como:
- Chiles en nogada: este plato es un claro ejemplo de la fusión entre la cocina mexicana y española. Consiste en chiles poblanos rellenos de picadillo de carne con frutas y nueces. Se bañan con una salsa de nuez y se decoran con granada, ingredientes que representan los colores de la bandera mexicana. La técnica de rellenar y cubrir los chiles es de origen español, pero los ingredientes utilizados en el relleno son típicamente mexicanos.
- Tacos al pastor: inspirado en el shawarma libanés que llegó a México a través de los inmigrantes árabes. Sin embargo, la versión mexicana utiliza carne de cerdo marinada en chile y achiote, una especia típica de la cocina maya. La técnica de asar la carne en un trompo vertical es de origen español.
- Escamoles con gusanos de maguey: este platillo es una delicadeza de la gastronomía prehispánica mexicana. Son unos huevos de hormiga que se cocinan con gusanos de maguey, una planta que los mexicanos han utilizado durante siglos para hacer tequila y mezcal. La forma de cocinar los huevos es de origen español, pero el uso de los gusanos de maguey es una técnica prehispánica que se ha mantenido en la cocina mexicana hasta el día de hoy.
