¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que hace que ese platillo de tu mexicano favorito te haga sudar, pero que no puedas resistirte a probar más? Los amantes del picante son unos incomprendidos. Mucha gente no comprende por qué hay algunos que tienen adicción a esta sensación. Seguro que tras leer este artículo, entiendes mejor por qué a tu novio/a, amigo/a o familiar les gusta practicar el masoquismo cuando visitan un restaurante mexicano. La respuesta está en la Escala Scoville, un intrigante sistema de medición que revela el secreto detrás del picante. En este artículo, te desvelamos los misterios de la Escala Scoville y exploraremos cómo se cuantifica esa explosión de calor y sudor que hace que cada bocado sea toda una experiencia sensorial.
¿Cuál es el origen de la Escala Scoville?
La historia picante de la Escala Scoville comienza a principios del siglo XX, de la mano de un farmacéutico estadounidense de nombre Wilbur Scoville. En 1912, Scoville desarrolló este innovador método de medición con el objetivo de cuantificar y clasificar la intensidad del picante en diferentes variedades de pimientos y chiles. Su motivación inicial radicaba en la necesidad de ayudar a los consumidores y la industria alimentaria a comprender y etiquetar con precisión el nivel de calor en estos ingredientes fundamentales de la cocina mundial.
La Escala Scoville no es simplemente un número arbitrario; más bien, es el resultado de un proceso meticuloso. Scoville ideó un método de prueba que implica diluir extractos de pimiento en azúcar y agua, y luego someterlos a ‘cobayas humanas’ para determinar en qué punto el picante se volvía imperceptible. Cuanto mayor era la dilución necesaria para alcanzar este umbral, mayor sería la puntuación en la Escala Scoville. Este enfoque, aunque subjetivo, proporcionó una medida relativa del picante que ha perdurado a lo largo del tiempo.
Así, la Escala Scoville se convirtió en la herramienta estándar para clasificar el nivel de picante de los alimentos, desde los suaves pimientos bell en la base de la escala hasta los intensos chiles habaneros en la cúspide de la misma. Este sistema ha resistido la prueba del tiempo y es en el mundo alimentaria y culinario en la actualidad.
Alimentos más picantes de la Escala Scoville
En la cima de la escala, encontramos al temible Carolina Reaper, ostentando el título del chile más picante del mundo. Con una asombrosa puntuación de más de 2 millones de unidades Scoville, este pequeño pero poderoso pimiento desafía incluso a los más valientes buscadores de emociones culinarias. Originario de Carolina del Sur, este chile no es solo una fuente de calor extremo, sino también un desafío para los aficionados a la comida picante.
No muy lejos en la clasificación, el Ghost Pepper, también conocido como Bhut Jolokia, se alza con una potencia que ronda el millón de unidades Scoville. Originario de la India, este chile ha ganado popularidad en todo el mundo gracias a su sabor robusto y su picante que perdura, dejando una impresión memorable en cada bocado.
Pero la intensidad no se limita solo a los chiles. Incluso alimentos cotidianos como la salsa picante habanera pueden sorprender con su calidez persistente. La Escala Scoville no discrimina y nos recuerda que hasta los condimentos aparentemente inofensivos pueden embriagarnos con su potencia.